martes, 31 de agosto de 2010

El libro de la decepción

Ayer, por fin, logré terminarme El libro del poder de Fedra Egea y digo "por fin" porque con este libro he tenido mala relación desde la primera página y me ha costado leerlo una barbaridad. De hecho, lo empecé en el tren y tenía cuatro horas por delante, pero me gustó tan poco que no pasé de las 100 páginas.

Se podría decir que sufre el síndrome de Alicia de Tim Burton, promete mucho, estéticamente, muy cuidado, pero el interior no termina de convercer. Tanto la portada como la edición son de lujo, llaman la atención desde la estantería de la librería, pero luego lo que es la novela en sí decepciona.

El mundo que nos presenta El libro del poder es un lugar donde la magia sólo puede ser utilizada por los magos, los nobles, mientras que los PS (el pueblo llano, vamos) lo tienen absolutamente prohibido. Pues bien, la protagonista, Ksar, a pesar de ser una PS, acude a escondidas a las clases del maestro Scopo y sabe más magia que los niños ricos a los que enseña el anciano sabio.

Ksar, además, trabaja en el sector de seguridad. Sin embargo, ante la llegada de Fontyr, ve como, poco a poco, la van apartando de las misiones.

La historia arranca cuando escondida en la clase de Scopo, Ksar descubre un hechizo nuevo que sirve para alterar su aspecto y convertirlo en el de otra persona. Ksar hace pruebas y acaba transformada en la mejor amiga de la reina con la mala suerte de que ésta la ve y, claro, cree que es su amiga. La reina, Valisia, se queja de discutir con León, un PS con el que tiene una relación; además, le explica, León siempre ha estado enamorado de otra, algo que ella aceptó desde el principio.

Entre una cosa y otra, Ksar acaba llegando al despacho de su odiado Fontyr y, al oír que alguien se acerca, acaba escondida en un hueco secreto. Desde allí oye como el maestro Scopo habla con alguien sobre El libro del poder y que hay un traidor en el reino que se lo quiere llevar. Scopo deja muy claro que el único al que le daría la información necesaria para conseguir el libro es Fontyr y, entonces, el otro lo asesina.

A partir de ese momento se desarrolla una investigación sobre quién es el traidor que ha asesinado a Scopo, además de una serie de aventuras para conseguir reunir el libro con el nuevo Sabio, del cual nadie conoce la identidad... Aunque tampoco hace falta ser demasiado listo para deducirla, ¿no creéis?

Ese es uno de los mayores problemas del libro: es tremendamente predecible. A mí personalmente no me sorprendieron ninguna de las resoluciones de los misterios: desde que se menta a un nuevo Sabio que nadie conoce, sabes que es Ksar, la protagonista (siento el spoiler, pero, sinceramente, creo que hasta con mi cutrez de resumen se adivina fácilmente); lo mismo puede decirse de la identidad del traidor. También son muy predecibles los comportamientos de los personajes, las relaciones entre ellos y las historias de amor (voy a ser buena y contaré dos).

Aunque, en mi opinión, el gran fallo de esta novela es la forma en la que está escrita. Artificial, impersonal, fría... Desde el principio empiezas a leer y la narrativa es tan distante, tan artificial, que no llegas a meterte dentro de la novela. Además, parece que la propia autora no se pone de acuerdo en el estilo de escritura; a veces parece que quiere emular a los grandes clásicos, pero entonces, de repente, brota algo distinto, como más desenfadado... De hecho, eso se aprecia, sobre todo, en los diálogos. La autora intenta que sean divertidos, amenos, televisivos, pero en realidad son acartonados, irreales, como lo que escribiría un mal guionista.

Durante toda la novela, la autora no cumple con lo que busca: ni romanticismo, ni sentimentalismo, ni diversión... No despierta nada en el lector, lo deja frío, sin conectar. Mientras leía no me importaba que Ksar y Fontyr se liaran, los pasajes que buscaban afectarme me dejaban indiferente... Eso en una novela no es bueno. Una novela debe conectar con el lector, éste debe desvivirse por saber qué va a pasar, anhelar que la historia de amor se consuma o sufrir con los personajes. Pero El libro del poder no lo consigue.

También está muy plan planteada. Fedra Egea no sabe introducir el mundo donde desarrolla la acción, da por hecho que lo conoces tan bien como ella y no se molesta demasiado en que lo vayas conociendo, por lo que te puedes hasta perder. Tampoco sabe plantear las situaciones. Por ejemplo, hay un personaje que muere y cuando lo hace, no sabes nada de él, por lo que te da igual que esté muerto. No obstante, luego te informan de que es alguien cercano a la protagonista y hay una escena que busca el que lamentes la muerte, pero no llegas a hacerlo.

Finalmente, tampoco los personajes merecen la pena. No me gustó ninguno, tampoco odié a ninguno, me eran absolutamente todos indiferentes. Resultan demasiados cliché y, muchas veces, tanto su personalidad como su comportamiento resulta de lo más ilógico teniendo en cuenta cómo se supone que son o el lugar qué ocupan en la historia. Realmente chirriante encontré el que Valisia, la reina regente que tiene ante sus manos ya no sólo que un traidor intenta matarla, sino que su reino se esté desmoronando a toda velocidad, se comporte como una quinceañera y sólo sirva para hablar con Fontyr sobre lo que sienten o para descubrir que, oh sorpresa, en realidad está enamorada de su mejor amigo al que no hacía ni caso.

Eso, por no hablar, de que tras años de mala relación entre Fontyr y Ksar y de que ésta le odie a muerte, pasen a estar súper enamorados de repente. Venga, vale, los que se pelean se desean, pero un poco de transición no le hace daño a nadie. De hecho, con lo cabezota y orgullosa que es Ksar no es lógico que caiga de buenas en esa relación con alguien al que ha estado odiando y envidiando durante tiempo.

En resumidas cuentas, la edición de Espasa muy elaborada y muy bonita, pero la historia en sí de lo más mediocre: previsible, mal escrita y protagonizada por clichés que cambian de personalidad si así lo requiere la historia.

PD: Esta tarde se ha estrenado la nueva temporada de Sé lo que hicisteis y han hecho un montón de cambios. A mí me ha molado un montón, pero esperaré un par de días para hablar de ellos ^^

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